Se pasó la semana después de elecciones con la característica de que Petro, desesperado, empezó a recoger la basura de la política; cuanto politiquero asustado, porque puede perder contratos, se refugia en esa madriguera. Samper, Roy, Piedad y el rufián de Benedetti están reciclando lo peorcito de la política regional; con excepción de los despistados sin votos, Mockus y Alejandro Gaviria, no se hace un caldo de esas adhesiones.
En la izquierda lo que no se perdona son las incoherencias. ¿Cómo puede engendrar un cambio quien ha pactado con el establecimiento, para llegar a gobernar con los mismos? Por eso Petro no sube en las encuestas, a pesar de que se ha dedicado a decir mentiras sobre el viejo Rodolfo que, escala del 28% al 40% en una semana en intención de voto.
Fajardo aún no decide qué hacer, aunque los petristas del verde ya salieron del closet. Si es inteligente y quiere seguir en la política, debe irse donde RH. Ahí sería figura trascendental; nadie puede negar que, el programa del fajardismo es sin duda el más coherente; Fajardo no hizo tratos con ningún político, lo mismo que Rodolfo; eso sin duda los debe unir. Quedarse viendo ballenas blancas, con el voto ídem, sería su entierro político; para donde Petro no se irá porque Fajardo es un hombre de principios.
El ingeniero RH, víctima de todo tipo de bellaquerías, sigue en su línea; preparándose para la última semana donde sacará la artillería. Estoy seguro que el boyaco Amaya se irá con él y ese sí tuvo 400 mil votos en consulta; ese será un buen refuerzo.
Las amenazas de los seguidores de Petro de incendiar al País si pierden, es la razón por la cual no se quiere a Petro y la nación le tiene pánico a que nos convierta en Venezuela. Nada de beneficio le hacen esas turbas destructivas a esa campaña; mucho más si Petro se queda callado frente a esas amenazas.
Ñapa: Cada vez me siento más orgulloso de mi paisana Marelen Castillo; transmite alegría con su sonrisa y no resentimiento. Habla con conocimiento y docencia, no con rabia; tendremos una vicepresidenta de lujo; con ella el Valle del Cauca vuelve a ser importante, después de muchos años, en el ámbito nacional.
Ñapita: Buena escogencia del nuevo entrenador de la Selección de Fútbol; conoce muy bien el jugador colombiano.
Ñaputa: Que Rudolf Hommes sea del equipo de Petro es inaudito; el que se inventó la apertura económica y los tratados de libre comercio, es ahora asesor del cambio. ¡Joder! Vivir para ver.
