Con cerca de 600 espectadores por cada función, el colectivo de teatro Luz a Escena, Ecos de Vos, de la Institución Educativa Oficial Hernando Navia Varón, presentó al público caleño las obras Pachamama y En memoria de Joaquín, en el Teatro Municipal Enrique Buenaventura.
80 estudiantes de los grados transición hasta 11 y algunos egresados fueron los actores que les dieron vida a los personajes de dos puestas en escena, resultado del trabajo de creación colectiva en el que sus integrantes quisieron dejar un mensaje de reflexión.
En la primera obra, Pachamama, los asistentes disfrutaron de un espectáculo mágico lleno de colores y diversidad. Una función que invitó a la reflexión. Una puesta en escena que representa a la madre tierra llorando porque ya no puede ocultar más su dolor.
“Pachamama es un grito, un suspiro, un llamado de atención a la humanidad, que nace en las voces de los niños, presente y futuro, que vela por las transformaciones de una madre tierra, lastimada y dolida por sus hijos”, comentó el director del colectivo, egresado del Navia Varón, Miguel Ángel Estrada.
El segundo estreno, En memoria de Joaquín es un relato vivo que recoge las memorias de los campesinos y pescadores de las diversas regiones de nuestro país. Se reflejaron fenómenos como el desplazamiento, la pobreza, la prostitución, la violencia intrafamiliar, el aborto y el matoneo.
El director Estrada señaló: “Es un relato vivo en el que viajamos al mundo de las almas olvidadas para descubrir en los pasos y momentos de Joaquín, las realidades que nos golpean como colombianos, mientras descubrimos la razón del último beso que le dio la esposa a Joaquín”.
Bilmer Calero Padilla, rector del establecimiento educativo, expresó: “De la emoción se me salieron las lágrimas como siempre, porque ellos tocan mi corazón y espero que en algún momento los que no los han visto también se dejen tocar por ellos”.
Mery Burbano, abuela de uno de los jóvenes actores, al finalizar las funciones dijo: “Me gustó mucho; me gustaría que lo siguieran haciendo porque así los muchachos se mantienen entretenidos, es muy linda la obra y uno también se divierte viniéndolos a ver”.
Este es el resultado de meses de trabajo, de estudio y de entrenamiento y es también el fruto de un esfuerzo conjunto de una comunidad educativa, donde padres de familia y cuidadores hicieron parte de la apuesta académica, pues algunos de ellos fueron los encargados de confeccionar el vestuario para las obras. Además, el día del estreno estuvieron tras bambalinas ayudando a los niños, niñas y jóvenes actores con la personificación de sus representaciones.