Por: GUSTAVO ÁLVAREZ GARDEAZÁBAL
La creciente falta de conocimiento de cómo se mueve el país, y cuáles son los canales a través de los que se desarrollan sus flujos económicos, impidieron que durante una semana en todo el país, menos en Nariño, se dieran cuenta de las gravísimas consecuencias que tendría el gigantesco derrumbe entre Pasto y Popayán.
Creo que fui el único ese mismo día que puse un twitter preguntándole a Mintransporte y Minhacienda si ya estaban calculando la magnitud de las consecuencias en la economía nacional que ese taponamiento iba a tener.
El presidente Petro, que andaba por Chile, canceló su viaje y todos creímos que lo hacía realmente informado por sus ministros de las consecuencias inmediatas y a mediano plazo de ese derrumbe cerrando la vía a Pasto.
Ahora hemos deducido, por lo poco que se ha hecho para afrontar el asunto con algo más que palabras y promesas, el que nadie cercano al primer mandatario le explicó la geografía,el flujo de mercaderías y muchos menos las consecuencias para Nariño, y para el occidente colombiano de mantener más de una semana cerrado el tráfico.
Los medios se encargaron de hacer creer que la trocha que pasa por La Sierra era una carretera alterna. A nadie se le ocurrió mostrar la opción de ir de Pasto a Mocoa por una carretera en regulares condiciones y de allí a Pitalito y Neiva. Mucho menos que consideraron la opción de ir hasta el Ecuador, dar una vuelta en U y salir al puente de San Miguel para buscar también Mocoa.
En ninguna dependencia oficial se habló de usar el cabotaje de Buenaventura a Tumaco o de ingresar las mercancías, alimentos y materias primas por Manta o Esmeraldas usando también el cabotaje a Tumaco.
Menos de hacer un gran puente aéreo hasta el aeropuerto de Chachagüí. Solo han hablado de una carretera a cuatro años o de una variante a 30 días. No importa que en Nariño no se consigan ni pollos ni huevos ni en las fábricas de Cali que maquilan materias primas ecuatorianas haya que despedir personal. Es la Colombia de Petro, desencuadernada antes de pasar las primeras páginas.