Por: Mariela Díaz Romero
Una de las novedades que trae este 2023 es la visibilidad de muchas escritoras latinoamericanas en diversas partes del mundo, sobre todo en aquellas regiones y países en los que existe una valoración cultural importante en torno de la escritura hecha por mujeres. Uno de estos casos afortunados es el de la escritora caleña Angela Becerra, autora de una extensa obra y que ha sido reconocida por su calidad.
Algunas de sus novelas son “Alma abierta” (2001); “De los amores negados” (2002); “El penúltimo sueño” (2005); “Lo que le falta al tiempo” (2006); “Ella, que todo lo tuvo” (2009); “Amor con A” (2009), “Memorias de un sinvergüenza de siete suelas” (2013), “Algún día, hoy” (2019), entre otras.
Por la novela “Algún día, hoy”, Becerra recibió el XXIV Premio Fernando Lara de Novela, otorgado por la Fundación José Manuel Lara, de Sevilla, España. Con anterioridad le fue otorgado el Premio Azorín por “El penúltimo sueño” y el Casa de América por “Ella”.
En la novela más reciente, Becerra aborda la figura de Betsabé Espinal, una colombiana de 23 años de edad, hilandera en una fábrica textil, que fue protagonista de la primera huelga de mujeres en América Latina.
Becerra contó al diario “El Confidencial” que supo de este personaje de una forma fortuita. Una noche de desvelo optó por mirar la TV y encontró un documental en el que hablaban de ella.
Así fue como surgió el interés. Desde ese momento, la escritora comenzó a investigar al personaje, que a pesar de haber mostrado una valentía fuera de serie y de ser una mujer de gran interés había caído en el anonimato. “Ella llegó a mí. Las historias, si te consideran dignas, se te meten y te fecundan”.
Sin embargo, la información alrededor de Espinal no era abundante y eso antes que ser un factor en contra le facilitó imaginar y convertirla en un personaje que cobrara vida en las páginas de “Algún día, hoy”.
Para ello realizó una extensa documentación que no solo le llevó a viajar a la ciudad de Medellín para investigar directamente lo que necesitaba, sino que además su búsqueda fue incansable para buscar el tono en el que debía contar esta historia. Y la épica le dio voz no solo a Betsabé Espinal sino también a Angela Becerra que hurgó en sí misma para reconciliarse con su yo de la adolescencia, porque la rebeldía de aquellos años le sirvió para modelar a Betsabé.
De este modo, ese personaje –cuenta Becerra- le permitió indagar en ella. Agrega que recuperó con Betsabé su niñez ya que ella también tuvo una niñez salvaje, de ir descalza, de meterse en los charcos y recoger renacuajo. Betsabé de alguna manera se conectó con esa rebeldía, a la vez con la necesidad de ser reconocida y reivindicada ya que fue una niña de escasos recursos económicos, huérfana, que desde pequeña se vio obligada a trabajar en las condiciones más precarias pero a la vez se enfrentó al poder que se aprovechaba no solo de ella sino de decenas de niñas, que debieron laborar en condiciones infrahumanas para sobrevivir.
Sin embargo, Becerra rescata a esta heroína silenciada y logra hacerla vivir entre las páginas de “Algún día, hoy”, novela que fue editada en 2019 por Editorial Planeta, y que se puede leer en bibliotecas y en librerías.
La fundación sevillana José Manuel Lara, patrocinadora del Premio Fernando Lara de Novela, tiene como propósito contribuir a la divulgación, desarrollo. Investigación y protección de la cultura, así como el fomento de la lectura y el apoyo a la educación como gran motor del desarrollo de la sociedad.