En nuestro imaginario colectivo, la palabra bosque nos conduce a pensar en espacios con exuberante vegetación primaria o secundaria, en vías de regeneración, con presencia de todo tipo de fauna y microorganismos. En palabras más sencillas, en un área densamente poblada de árboles, arbustos, matorrales y diversos animales.
El concepto de bosque urbano en Cali ha ido construyéndose desde la interacción entre un colectivo de ciudadanos y funcionarios del Departamento Administrativo de Gestión del Medio Ambiente-Dagma, y sobre las intervenciones en parques barriales, como un ejemplo de construcción participativa de políticas públicas.
Literalmente, los bosques urbanos en la ciudad no son entonces bosques sino una amalgama de espacios públicos (parques barriales, rondas de canales o ríos, separadores viales, campus universitarios, etc.) y privados (campus universitarios, unidades residenciales, áreas verdes de centros de salud o escenarios deportivos, etc.). Todos hacen parte de la malla verde y de su estructura ecológica complementaria y, además, son generadores de transformaciones socio-ecológicas en un entorno o polígono cercano definido por criterios construidos en cada proceso.
Son la demostración del potencial de gobernanza y cultura ambiental, donde las comunidades se apropian del territorio y desarrollan procesos ambientales, que permitirán al resto de caleños y caleñas disfrutar y aprovechar los servicios eco-sistémicos que prestan los 25 bosques urbanos que hoy tiene Santiago de Cali.
En el desarrollo de esta iniciativa de origen comunitario, es importante reconocer a ese ‘bosque’ de ciudadanos que en los puntos cardinales han trabajado para que todos disfrutemos del confort térmico y oxígeno que, entre muchas cosas, generan los árboles.
Los bosques urbanos surgen como una iniciativa complementaria de conservación, impulsada por la autoridad ambiental local y desarrollada y consolidada por un conglomerado de ciudadanos e instituciones. Se trata de la Red Comunitaria de Bosques Urbanos, que ha logrado, a febrero de 2023, incluir 21 nuevos espacios de ciudad (completando 25 en total) con diferentes niveles de desarrollo y complejidad y que representan el 20% del área verde de Cali.
Esta Red accede, de manera participativa, a recursos públicos manejados por las autoridades ambientales, ejerce mecanismos de veeduría y logró establecer su página web (bosquesurbanosdecali.com), que a la fecha incluye los avances de cinco bosques, además de jardines para polinizadores, señalética formativa, siembra de especies de bosque seco y árboles frutales nativos.
Asimismo, trabaja en la caracterización de diferentes coberturas, además de capacitaciones para que las comunidades vinculen sus bosques a la plataforma internacional i-tree, que permite la evaluación de la silvicultura urbana y comunitaria, conociendo los beneficios generados en cuanto a la mitigación de los efectos del cambio climático, generación de oxígeno y captación de CO2.
A la fecha y apoyados en recursos gestionados con la autoridad ambiental regional CVC, en los bosques urbanos de la ciudad se desarrolla un proyecto diseñado por los miembros de la Red Comunitaria de Bosques Urbanos, acompañados por el Dagma, que entregará 15 esquemas de armonización en igual número de bosques y sus polígonos de influencia.
La estrategia definirá objetivos de conservación, un plan de acción para el espacio y su polígono de influencia, sembrando participativamente especies de bosque seco con el fin de disminuir las islas de calor, aumentar y mejorar la conectividad ecológica y estrechar la brecha social con el oriente de la capital vallecaucana.
El otro ámbito de gestión de la Red Comunitaria y el Dagma son los espacios de influencia de los bosques urbanos. En compañía de los vecinos de cada sector y aplicando la metodología consignada en la Resolución 1530 de 2019 (Plan de Silvicultura de Santiago de Cali), que incluye acompañamiento de Emcali y Gases de Occidente, se están diseñando siembras de árboles y palmas nativas en lugares del centro y oriente (barrio Obrero, Corredor de las Flores y comuna 6), rompiendo parte del pavimento de los andenes y, con apadrinamiento de los habitantes, iniciando un proceso de re-naturalización de estos sectores.
Esta es, sin lugar a dudas, una metodología novedosa y participativa que garantiza la permanencia y desarrollo de los árboles y palmas; así como la generación de conciencia que permita transformar parte de los espacios endurecidos; la buena aplicación de recursos públicos y la disminución de las islas de calor, para el aumento del confort y la biodiversidad de plantas, aves, mamíferos e insectos.
Los bosques urbanos de Cali…
1. Guadual de la 56.
2. La Umbría.
3. Alcibíades Libreros.
4. La Hacienda.
5. La Flora.
6. Parque del Acueducto.
7. Campus colegio Santa Librada.
8. Corredor de las Flores.
9. Loma de la Cruz.
10. Multicentro.
11. San Miguel.
12. Altos de Santa Elena.
13. Comuna 6.
14. Sendero Calima.
15. Miraflores.
16. Campus Univalle.
17. Compañía de Jesús.
18. Universidad de San Buenaventura.
19. Panamericano.
20. Guásimos.
21. La merced.
22. Entre Lomas.
23. Unidad Deportiva Jaime Aparicio.
24. Unicatólica
25. Fundación Valle del Lili.
