Cada 15 de agosto, sin importar el sol o la lluvia, la fiesta de la Virgen de la Asunción reúne a la comunidad de Playa Renaciente ubicada en el corregimiento de Navarro, sector de Juanchito, para compartir esta práctica cultural y religiosa.
El río Cauca es recorrido con la tradicional balsada y durante algunos tramos con diferentes embarcaciones, la comunidad con fe y fervor canta y baila rindiendo honor a la Virgen.
El encuentro, no solo concentra a los moradores de este sector caleño, porque son muchos los turistas que cada año se congregan para conocer de esta fiesta que inicia con la alborada y además incluye la misa inculturada, muestra de cocina y bebidas tradicionales, recorrido a las rogativas a la Asunción de la Virgen, el desfile de angelitos con la participación de niños y niñas, presentaciones artísticas y la ruta cultural de turismo comunitario.
La balsada a la Virgen hace parte de las manifestaciones del Inventario Inmaterial y Cultural y la Administración Distrital, a través del programa CaliAfro de la Secretaría de Bienestar Social, en cumplimiento de la Política Pública para las comunidades negras, afrocolombianas, raizales y palenquera, apoya este tipo de iniciativas para mantener los usos, tradiciones y costumbres de los pueblos y comunidades que habitan la capital vallecaucana.
Inge Boudewijn, ciudadana holandesa que por primera vez participó en esta fiesta patronal, expresó: “Estamos aquí para conocer que hay en Colombia desde la cultura afrodescendiente; es algo muy nuevo para mí, es muy bonito, me encanta la música, poder aprender más porque de donde yo vengo no tenemos cosas así”, acotó.
La ecuatoriana Juana Francis Bone, quien participó en la balsada, indicó: “ha sido como conectar una parte de la diáspora negra; para nosotras ha sido como de mucho aprendizaje visitar a Cali, visitar esta zona, conocer que se parece mucho a nuestro trabajo, lo que realizamos espiritualmente pero también lo que hacemos políticamente para sostener la memoria colectiva del pueblo negro”
Y aseveró: “Es la primera vez que participó de esta fiesta, de este pregón de la parte espiritual de la construcción de las barcas. Nos parece muy poderoso como se ha ido realizando todo el trabajo. En Ecuador tenemos una fiesta muy similar que es la de San Martin, y la parte espiritual es una herramienta de resistencia extremadamente poderosa para nuestras comunidades y que nos mantiene, además, conectados de formas múltiples y reconociéndonos de formas múltiples”.
Para la cantora Alicia Arrechea Alegría, lo importante de esta fiesta es poderle cumplir las promesas a la Virgen. “Cada 15 de agosto la comunidad del sector y de otros territorios, siempre nos reencontramos, nos juntamos y vienen de otros países también en torno a esta celebración, la cultura nos une”. Afirmó.