Dayana Rivera Arroyo tiene 21 años y vive en el sector de Pizamos I en Cali, llegó cargada de ilusiones a la Feria de empleabilidad realizada en la Institución Educativa Nuevo Latir de la comuna 13.
Confesó que “de tanto pasar hojas de vida se le habían acabado las fotos para anexarlas al documento”, con mucho esfuerzo pudo tomarse algunas y así, con su mejor sonrisa se animó a buscar nuevos horizontes para su vida laboral.
Manifiesto con optimismo: “Es una oportunidad para uno adquirir experiencia, he metido demasiadas hojas de vida, desde la semana pasada estoy pendiente de esta jornada, no tenía ni una fotico ya las había enviado a otras empresas, ayer fui por ellas para poder asistir hoy, no he perdido la esperanza y sigo y sigo intentando porque uno no debe rendirse”.
Al igual que Dayana, más de 500 personas, entre jóvenes y víctimas del conflicto, aprovecharon esta jornada organizada por el Programa Perla de la Secretaría de Seguridad y Justicia, en articulación con la Subsecretaría de Atención Integral a Víctimas, con el objetivo de atender a población víctima del conflicto y a jóvenes con una completa oferta integral y con la oportunidad de obtener empleo.
Durante la feria se contó con los servicios de acceso a la justicia de la Secretaría de Seguridad y Justicia, con las Casas de Justicia, Centro de Conciliación Distrital, sensibilización en prevención de violencia de género e intrafamiliar y prevención situacional del delito, así mismo estuvieron presentes, Familias en Acción, Sisbén, Zoonosis, Unidad de Atención a Víctimas, Fiscalía y Policía Metropolitana entre otros.
Las empresas comprometidas con la jornada pusieron en la mesa más de 800 vacantes en diversas áreas, con el firme propósito de brindar oportunidades a los asistentes.
Malbin Restrepo Martínez, líder del programa Perla, de la subsecretaría de Políticas de Seguridad, indicó que “estos espacios se realizar con el fin de reducir los índices de violencia en los jóvenes y de impactar positivamente a la ciudad, especialmente en las comunas priorizadas por índices de alta violencia, donde se trabaja directamente con jóvenes y sus familias, en busca de transformar sus vidas mediante un acompañamiento profesional y oportunidades de trasformar sus contextos de vida”
Para Andrés Cortés habitante del barrio Mojica, “este evento le permite la oportunidad de poder tener un trabajo, me dicen que esta semana nos estarían llamando, la verdad el tener empleo se puede acabar con tanta violencia, porque ya la gente tiene unos ingresos para ir a comprar su comida y mantener a su familia”, comentó este joven quien ha trabajo en el área de la construcción y está dispuesto a laborar en lo que resulte.
Al finalizar la jornada los asistentes agradecieron por la oportunidad y los servicios recibidos, muchos con la ilusión intacta de mejorar su vida con un buen trabajo, así como afirmó Dayana Rivera, “A mí me gusta lo relacionado con atención a niños, siento que me destaco en eso, por ahora quiero tener mi trabajo con un empleo básico y salario mínimo para poder pagar mis estudios, tener la oportunidad de crecer como persona y no rendirme siempre, seguir adelante por mí y por mis hijas”