Por: Miguel Ángel Arango

Ataca concejal Fabio Arroyave
GUERRERO Y ARMITAGE SON LOS CONTINUISTAS

El concejal y jefe del liberalismo vallecaucano, Fabio Arroyave Botero, llamó continuistas a los exalcaldes de Cali,Rodrigo Guerrero Velasco y Maurice Armitage, de quienes dijo fueron gobernantes mediocres y hoy pretenden seguir con el control de la ciudad a través de Alejandro Eder.
Arroyave afirmó que el exalcalde Guerrero se aferró al poder y desde su cargo logró elegir como sucesor a Armitage. No dejaron huella en la ciudad porque los dos fracasaron como alcaldes”, agregó el líder liberal.

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Luego manifestó que Rodrigo Guerrero, tras de facilitar la elección de Armitage reinó en el gobierno de Armitage y tuvo cuotas como la de Alex Duran, en la secretaría de salud, quien hoy es el jefe de debate de Eder.
“Armitage ayudó a elegir a Jorge Iván Ospina y tuvo en esta administración la secretaria de riesgos con Rodrigo Zamorano y la secretaria de movilidad con William Vallejo”, espetó el concejal Arroyave.

Aseguró que Eder y sus aliados le mienten a Cali en su desespero por recuperar la alcaldía y acuden al engaño al decir que Roberto Ortiz, es el candidato del gobierno de Jorge Iván Ospina.
“Ortiz durante cuatro años ha sido mi compañero en el cabildo y fue el que más denunció y cuestionó decisiones de Ospina y nunca aprobó proyectos de acuerdo al considerar que le hacían daño a la ciudad”, precisó el político.
Considera que es una trampa a Cali cuando Alejandro Eder y sus aliados políticos mienten al señalar a Ortiz como el candidato del continuismo.

“Están asustados porque Roberto Ortiz, es un hombre decente, querido por todos los caleños, que ha ganado todas las encuestas con enorme diferencia y por eso no hacen propuestas sino que acuden a la infamia para descalificar a un hombre que ha sido valiente en su lucha contra la corrupción”, manifestó el jefe liberal.

SIGUE
La candidatura a la alcaldía de Cali, de Miyerlandi Torres, está descartada. La dama hace una campaña interesante y ocupa un lugar en las encuestas que no es incómodo para una persona que apenas destapa su liderazgo político.
En su campaña luego de analizar el momento político de la ciudad concluyeron que es mejor seguir dándole la pelea y sacar una votación digna.
Al igual que otras mujeres de la política cuestiona a Diana Rojas, por renunciar a su candidatura para ofrecerle a su jefe político Maurice Armitage, quien la obligó a dimitir para que su sumara a Eder.

DECEPCION
Durante los días miércoles y jueves de la semana pasada políticos que apoyan al comerciante Tulio Gómez, candidato a la gobernación del departamento, le organizaron un plantón para el viernes en la plazoleta de San Francisco, en protesta porque el consejo nacional electoral lo revocó.
La asistencia a ese plantón fue decepcionante. Había muy pocas personas en esa convocatoria y el candidato Gómez, no se atrevió a presentarse ante el lamentable acto.
Una vez el CNE confirmó la revocatoria del candidato algunos de sus aliados pidieron pista en las campañas de Dilián Francisca Toro y Santiago Castro. Otros le hacen campaña al voto en blanco.

GARROTE
En redes sociales no le va nada bien a Diana Rojas, tras retirar su candidatura a la alcaldía de Cali, para asociarse con Alejandro Eder.

La joven economista ha sido beligerante y muy agresiva en toda esta campaña y se mostró independiente y advirtió que no tenía jefes. La frustración para algunos de sus simpatizantes se sintió cuando Armitage púbicamente le pidió que renunciara y ella fue muy obediente.
Hasta la semana pasada era una iconoclasta que atacaba y cuestionaba adversarios por tener jefes políticos y ella se mostraba como independiente. Es el segundo revés en política. A su curul en el concejo renunció cuando aún le faltaba año y medio para terminar su periodo. Lo angustioso de esa adhesión es que aparecerá en el tarjetón y aquí se le pueden perder sus votos.
No olvidar el episodio de Clara Luz Roldán, en las elecciones del 2011 en donde renunció pero apareció en el tarjetón y sacó 15 mil votos. Los mismos que eran para Guerrero Velasco.