El 7 de octubre, un grupo de exfuncionarios del sector de Minas y Energía y de la CREG envió una carta al presidente Gustavo Petro alertándolo sobre una grave crisis energética en Colombia que podría resultar en un apagón.
El exministro Tomás González subrayó la necesidad de reconocer la crisis y tomar medidas rápidas para evitar problemas para los usuarios. Enfatizó la importancia de proporcionar liquidez al sistema eléctrico, especialmente durante el fenómeno de El Niño, y urgió al Gobierno a actuar con prontitud.
Se mencionó un cambio en la fórmula de la tarifa de energía como una medida, aunque se reconoció que no resolvería completamente la crisis.
Se recordó el costoso episodio de la intervención de Electricaribe y se expresó preocupación por las posibles presiones fiscales si el Estado debe intervenir en más empresas.
Natalia Gutiérrez, presidenta de Acolgen, también advirtió sobre una inminente crisis energética debido al rápido agotamiento de los embalses y la incertidumbre relacionada con El Niño. Destacó la importancia de garantizar el suministro de energía en los próximos meses.