Desde las 9:00 a.m. del miércoles 2 de octubre, la ciudad de Cali participó en el Simulacro Nacional de Respuesta a Emergencias, enfocándose en el escenario de riesgo sísmico.

El evento, coordinado por la Secretaría de Gestión del Riesgo de Emergencias y Desastres, instaló un Puesto de Mando Unificado (PMU) en la Plazoleta Jairo Varela, donde se monitorearon todas las actividades en conjunto con las entidades del Sistema Distrital de Gestión del Riesgo.

El simulacro contó con la participación de 1.729 instituciones, de las cuales:

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1.406 son privadas,

156 públicas,

y 167 corresponden a grupos comunitarios.

Entre las organizaciones que se sumaron al ejercicio estuvieron empresas, colegios, clínicas y hospitales, demostrando un fuerte compromiso de la comunidad caleña para mejorar su capacidad de respuesta ante desastres naturales.

Más de 91 mil personas se involucraron activamente en el simulacro, lo que representa un incremento del 5% en comparación con el año anterior. “Esto demuestra que vamos por buen camino en fortalecer la cultura de gestión del riesgo en Cali”, indicó María Alexandra Pacheco Muñoz, secretaria de Gestión del Riesgo de Emergencias y Desastres.

La Administración Distrital también participó desde el Centro Administrativo Municipal (CAM), donde se realizaron tres ejercicios específicos:

Evacuación de 1.600 personas en un tiempo de 7 minutos con 32 segundos.

Atención de incendio en un edificio alto.

Búsqueda y rescate de una persona atrapada en un incendio.

La jornada no solo fue un simulacro, sino también una oportunidad para reafirmar el compromiso del alcalde Alejandro Eder de fortalecer la capacidad de respuesta de la ciudad ante situaciones de emergencia. “Con estos ejercicios, nos preparamos para la atención de emergencias de todo tipo y mostramos nuestra disposición para eventos internacionales como la COP16”, señaló el mandatario.

El Simulacro Nacional de Respuesta a Emergencias es un paso importante para consolidar a Cali como una ciudad resiliente y preparada frente a diversos escenarios de riesgo, poniendo en práctica protocolos que, en caso de sismo, pueden salvar miles de vidas.