Durante la COP16, se ha otorgado un permiso temporal que permite la promoción y comercialización del viche y sus derivados, brindando una oportunidad única para que productores de diversas regiones del Pacífico colombiano compartan esta bebida ancestral con los asistentes al evento. La medida, impulsada por la Gobernación del Valle del Cauca, ha sido celebrada por los productores como un canal crucial para visibilizar su labor y fomentar el desarrollo económico local.
Lizethe Martínez, productora de viche en Quibdó, Chocó, destacó la importancia de esta oportunidad:
«Tener plataformas como estas donde podamos comunicarle a la gente qué es el viche y su esencia es indispensable. Además, es un canal de comercialización que garantiza nuestros mínimos vitales y permite una exposición que normalmente no tenemos por las limitaciones actuales».
Desde el río Cajambre en Buenaventura, Luz Rentería expresó su satisfacción:
«Esta es una oportunidad muy buena porque ha permitido ofrecer el viche, que muchas veces no tiene tanta salida por las restricciones. Participar en este evento ha sido muy importante para vender nuestros productos».
Por su parte, Lina Marcela Pencue, productora del municipio de Inzá, Cauca, señaló los beneficios a nivel comunitario:
«Nos vemos más beneficiados porque esto crea desarrollo dentro de nuestras comunidades y familias. Además, genera economía local y nos abre puertas hacia nuevos mercados».
La medida, que estará vigente hasta el 1 de noviembre, busca impulsar el trabajo de las comunidades afrodescendientes y campesinas que producen estas bebidas tradicionales, reconociendo su valor cultural y ancestral. La comercialización del viche en la COP16 no solo representa una forma de preservar esta tradición, sino también una vía para fortalecer la economía local y promover la inclusión en espacios internacionales.