El Gobierno del presidente Gustavo Petro está trabajando en un decreto que, a partir de la declaratoria de desastre nacional por la variabilidad climática, permitirá la movilización de recursos para atender a los damnificados por las fuertes lluvias y para la rehabilitación y reconstrucción de las áreas afectadas. Según Carlos Carrillo, director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), el decreto está en proceso de elaboración y su firma está próxima.
El objetivo inicial es la atención inmediata de los damnificados, seguida de medidas de reconstrucción. En 2022, se destinaron 1,6 billones de pesos para una situación similar, y se prevé que la cifra asignada en esta ocasión sea comparable o mayor. Las regiones prioritarias son Chocó, La Guajira, Santander y Bogotá debido a su situación crítica, incluyendo el problema de escasez de agua en la capital.
Para garantizar una gestión transparente de los recursos, el director de la UNGRD ha solicitado apoyo de organismos de control y medios de comunicación, dada la corrupción en la administración anterior de la entidad. Se estima que 30 mil familias han sido afectadas por las lluvias.
El Ministerio de Hacienda, encabezado por Ricardo Bonilla, anunció que se están evaluando recortes y reorientación de programas del presupuesto actual para financiar la atención a la emergencia. Se designará un ministro de Hacienda ad hoc para supervisar la transferencia de recursos y asegurar un manejo riguroso y transparente.