Julián Medina, un joven de 24 años, ha asumido con dedicación y pasión el liderazgo del comedor comunitario «Compartir Amor a Cucharadas», ubicado en el barrio Compartir de la comuna 21. Inspirado por el legado de su madre, Mariluz, y su abuela, Marina Medina, Julián ha convertido este espacio en un lugar de esperanza y transformación social para más de 80 personas diarias.
El comedor nació hace ocho años como una iniciativa familiar. “Mi madre y mi abuela comenzaron cocinando desde nuestra casa para ayudar a las familias vecinas que no tenían suficientes recursos para alimentarse adecuadamente”, relata Julián. Desde adolescente, mientras terminaba el colegio, Julián observó cómo el trabajo de su familia impactaba positivamente en la comunidad, lo que lo motivó a involucrarse cada vez más.
“Fui candidato a personero en el colegio. Aunque no gané, esa experiencia me impulsó a participar en la Junta de Acción Comunal junto a mi madre. Mientras ellas cocinaban, yo ayudaba en lo que podía”, recuerda Julián. Aunque ingresó a la universidad, nunca abandonó su compromiso con el comedor, dedicando tiempo a llevar alimentos al salón comunal y servir almuerzos.
En 2023, la situación del comedor dio un giro inesperado. Su madre tuvo que abandonar la ciudad por motivos de seguridad, y su abuela ya no podía participar activamente debido a problemas de salud. Fue entonces cuando Julián, con el apoyo de mujeres como Cristina Nieves, asumió el rol de gestor del comedor.
“Fue un momento decisivo. Aprendí mucho, me certifiqué en Buenas Prácticas de Manufactura (BPM) y formé un equipo comprometido con nuestras vecinas. Descubrí que la cocina no solo es una tarea, sino una forma de conectar con los demás. Cada plato servido alimenta el cuerpo, el alma y la esperanza de quienes acuden al comedor”, explica Julián.
Hoy, Julián alterna sus estudios universitarios con la gestión del comedor, además de participar en proyectos de apoyo vocacional para jóvenes y en espacios de incidencia social como la Plataforma de Juventud y la Junta de Acción Comunal. “Sueño con seguir ayudando desde el Consejo de Juventud, confiando siempre en Dios para guiar este proceso. El verdadero liderazgo nace del amor y del deseo de construir juntos un futuro mejor”, afirma.
Un legado de amor y servicio
El comedor «Compartir Amor a Cucharadas» se ha convertido en un símbolo de inspiración y transformación social en el barrio Compartir. A través de su labor, Julián Medina no solo alimenta a quienes más lo necesitan, sino que también fortalece el tejido social y demuestra que el liderazgo comunitario puede cambiar vidas.
“Los comedores comunitarios son espacios de bendición y esperanza. Aquí no solo servimos comida, sino que construimos comunidad”, concluye Julián, un joven que, con amor y dedicación, está dejando una huella imborrable en su territorio.
Datos clave:
- Comedor comunitario: «Compartir Amor a Cucharadas».
- Ubicación: Barrio Compartir, comuna 21.
- Beneficiarios: Más de 80 personas diarias.
- Líder: Julián Medina, joven de 24 años, estudiante universitario y gestor social.
