Por: DIANA MARIA RIOS S.
Las emociones, los sentimientos, las pruebas de la vida que todos enfrentamos nos ponen en jaque muchas veces sin saber qué camino tomar, por eso creo que es de suma importancia, trabajar en el entorno o red de apoyo, que es una estructura que brinda SOPORTE a alguien, lo que quiere decir que en el caso de salud mental hablamos de personas que brindan estabilidad y seguridad a una persona que atraviesa un mal momento.
Fortalecer este concepto de red de apoyo es fundamental para mejorar a nivel individual y colectivo, pues vamos a trabajar la empatía, la comprensión, la comunicación, la gratitud, el respeto y sobre todo el no juzgar, pues la realidad es que desconocemos el proceso que vive la persona, esto nos va a ayudar a ser más humanos sobre los retos que afrontamos.
Vivir en silencio un dolor emocional, sin conocer herramientas para saber cómo manejarlo, sin exteriorizarlo, es un martirio que ninguna persona debería padecer, pero es más común de lo que creemos, por eso quiero enfocarme, en “los demás”.
Porque “los demás” somos todos y si todos pensamos en todos, si se le baja a la agresividad y al egoísmo y más bien se le sube a la empatía, a la comprensión, al respeto que en conclusión es la FILANTROPÍA, que no es más que el amor a la humanidad, vamos a ser un factor diferencial para el resultado en la ecuación de nuestras vidas.
No ser tenido en cuenta, debe ser un comportamiento a remover, todos estamos viviendo un proceso de aprendizaje en esta vida, desde nuestro espíritu, nuestra energía, nuestra conciencia, desde nuestra humanidad, cada día debiéndonos adaptar a diferentes verdades que la vida nos depara.
Hablemos de esta realidad que el silencio por el tabú, está afectando nuestras relaciones en general, mujeres y hombres merecemos sanar, pero hay identificar la patología para así tratarla, la ansiedad, la depresión, los problemas económicos, la violencia de género, el síndrome de estrés pos traumático, la soledad en los adultos mayores, el bullying, la depresión postparto, los traumas no tratados, entre otros, son realidades que merecen toda nuestra atención y comprensión, como sociedad debemos mejorar en la atención, en el sistema de salud oportuno, en la empatía humana que es el trabajo que cada uno de nosotros debe hacer, sabiendo que cada quien está librando su propia batalla y si no puedes hacerlo, no lastimes, que así también ayudas.
Pues como dicen por ahí “Al que juzgue mi camino, le presto mis zapatos”
Las palabras construyen y destruyen, miremos a quien está a nuestro alrededor, tomémonos el tiempo de preguntarle a las personas ¿Cómo estás? ¿cómo te sientes?, ese puede ser el primer paso para abrirle la puerta a alguien para sanar.
Los invito a ser un emprendedor consciente en temas humanos, necesitamos llevarnos bien y eso se traduce en una mejor calidad de vida, la crítica y la queja poco aportan, seamos seres de transformación social positiva, esto nos beneficia a todos.
Como decía Facundo Cabral “Si los malos supieran que buen negocio es ser buenos, serían buenos así fuera por negocio”
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Recuerda que el cambio es de mentalidad, te mando un abrazo de corazón a corazón nos vemos la próxima, bendiciones
chao chao.
