La disidencia liderada por Jaime Martínez del Estado Mayor Central de las FARC ha levantado una carretera en la zona montañosa de Jamundí, generando preocupación en las Fuerzas Militares. A pesar de mantener diálogos con el gobierno, se sospecha que esta vía, extendida desde la región rural hasta La Playita en el río Naya, tiene como objetivo facilitar el transporte de drogas desde laboratorios ilegales hasta el Pacífico.
El General Eric Rodríguez, comandante del Comando Conjunto Suroccidente N.2, afirmó que la construcción de la carretera no busca el bienestar comunitario, sino que es fundamental para la exportación de alcaloides hacia el Pacífico. Además, Rodríguez destacó la violación sistemática de derechos humanos por parte de esta disidencia, que incluye retenciones, secuestros, homicidios y otras conductas delictivas para mantener su control territorial.
La Defensoría del Pueblo, en su Alerta Temprana de Inminencia 005-24, advierte que este grupo narcotraficante tiene dominio absoluto en la media y alta montaña, extendiéndose hacia zonas planas y el corregimiento de Timba. Se destaca también la falta de inversión social en la zona, fortaleciendo el control de estos grupos sobre la población.
En respuesta, el Comando Conjunto Suroccidente N.2 asegura que las operaciones continúan para frenar las actividades criminales de la disidencia. Además, se enfatiza que la solución no será solo militar y policial, sino también social, buscando ofrecer alternativas económicas lícitas a la población. Se insta a la población a denunciar cualquier situación de riesgo mediante la línea de reserva 107.