Por: Miguel Ángel Arango

LA OPOSICIÓN ARRINCONA A EDER
Alejandro Eder, es el alcalde más tierno que ha tenido Cali. Con facilidad reparte besos y abrazos a todos los ciudadanos. Las personas también le responden con cariño sus manifestaciones de amor y acuden masivamente a todas las convocatorias que hace la administración y en donde va a estar el gobernante. Esas buenas maneras no las miden en encuestas.

En la última encuesta de Invamer la imagen desfavorable de Eder subió del 47% al 57% y la favorable bajó del 38% al 31%.En la primera medición de la misma empresa-febrero 20024-la favorabilidad de Eder era de 64% o sea que en un año largo perdió 33 puntos.

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Este gobierno tiene especial presencia en todos los territorios y más en los sitios en donde se requiere la presencia del estado para llevar soluciones o al menos crear ilusiones. La policía se ve por todas partes y los retenes son tantos que a veces propician el rechazo de la gente. Sin embargo en esa encuesta el 47% de los consultados dijo que el principal problema de la ciudad es la inseguridad.

En comparación al pasado mejoramos en la instalación de luminarias y la recuperación de vías ya es fortaleza del alcalde de los caleños. La ciudad se ve bonita por todas partes con huecos y con desadaptados subidos en sus ruidosas motos en puntos de acceso a Cali y en otros la capital del Valle del Cauca luce esplendorosa.Tambiién fuimos sede de la COP 16 y miles de turistas nos visitaron.

Tuvimos ayer la maratón internacional de Cali y en octubre tendremos semana de la biodiversidad y una cumbre mundial de empresarios.

Faltan muchas cosas por mejorar pero el avance es notorio. La política tiene incidencia negativa en la percepción ciudadana sobre la gestión del primer mandatario de la ciudad. En oposición se encuentra la bancada de la Coalición del Pacto Histórico que tiene tres curules.

Una es como si el concejal no existiera a veces en las transmisiones de las plenarias creemos que el cabildante Luis Fernando Salazar, se esfumó de la tierra o anda escribiéndole a los muertos. Las concejalas de esa coalición son furiosas a la hora de hacer oposición a la administración caleña. María del Carmen Londoño y Ana Erazo, hacen denuncias sin miedo y esto gusta a un sector de la opinión pública.

La señora Erazo lo hace de manera excelente en sus denuncias recurrentes y es sabía a la hora de colocar el dedo en la llaga. Lo hace de maravilla y a veces los ciudadanos asumimos que las veinticuatro horas del día lee miles de cuartillas para detectar en dónde está el error o la maldad.

Fue Erazo la que generó gran impacto en la comunidad sobre la devolución de dineros del predial al Club Campestre. Lo hizo con tal convicción que la gente no creyó que en el pasado también se hiciera ese descuento porque en el pasado los ricos de Cali lograron que ese establecimiento tan encopetado fuera clasificado como bien de interés público y se ganara ese derecho. A pagar menos.

La concejala Ana Erazo, está en todo su derecho de ejercer la oposición. Lo hace porque ese discurso genera visibilización y a veces causa admiración y además la diatriba –no en este caso-es la esencia del discurso de la izquierda en Colombia la misma crítica que hoy recibe el gobierno nacional cuando no ha podido hacer lo que los otros sí pudieron hacer.

La doctora Erazo hoy es la estrella del concejo caleño.Se da un banquete fabuloso porque con mínimas excepciones el grueso de la coalición derrocha timidez a la hora de defender al alcalde.
Mientras tanto la concejala sigue toreando para los tendidos.

Denuncia que no es con mezcla fría sino con mezcla caliente que se deben recuperar las vías e induce a la condena social cuando afirma que la primera la compran extrañamente porque es más cara. Siembra escepticismo sobre la realidad de kilómetros de vías recuperados.

Al tiempo sataniza la contratación del alumbrado público y también le queda tiempo para hurgar en los desafueros contractuales de Metrocali y exige la cabeza la cabeza del señor que preside esa empresa porque no le genera confianza.

Mientras le den papaya la concejala Ana Erazo, seguirá ejerciendo su derecho a la denuncia y sembrando desconfianza entre los ciudadanos. Lo hace bien. No sé si existe el Oscar para la oposición y si existe se lo ganó siete meses antes de concluir el año.