Cali se ha convertido en una ciudad donde todo se puede hacer así esté por encima de la tranquilidad y la sana convivencia de los demás, al punto que del civismo de antes poco queda…
Se requiere, con urgencia manifiesta, de un movimiento que rescate las semillas de aquellos días donde imperaban la amabilidad y el sentido común a favor de los demás.
Como ejemplo de todo esto, más adelante les contaré el ejemplo de: “…El ya sabe correr…”.
Solo voy a poner tres ejemplos, aunque la lista es bien larga: caravanas de motociclistas por fiesta de Halloween; tránsito de carros, motos, ciclas y carretas por corredores del MIO y cierres de vías para fiestas en los barrios.
El “descuaderne” de la ciudad se incrementó a partir de las tomas, bloqueos, saqueos y otros desmanes que se cometieron en los días del paro y las protestas del 2021. De allí en adelante muchos creen que las autoridades son para irrespetarlas y ya hemos visto casos en que guardas de tránsito y agentes de policía son golpeados cuando intentan poner orden.
Y eso que no mencionó los ataques indiscriminados por ciudadanos expertos en “coliarse” en estaciones del MIO. A los usuarios nos da temor llamarles la atención, pues la reacción puede llegar a respuestas con armas cortopunzantes.
El pasado fin de semana, se tomó la “brillante” decisión de cerrar el túnel de la Avenida Colombia o Bulevar por temor a que las caravanas de motociclistas se lo tomarán y lo bloquearan convirtiéndolo en trofeo. La alternativa originó tremendo trancón por la calle 5ª., en el sentido sur-norte; fueron más de ocho cuadras de conductores buscando cómo salir de allí.
Sin duda que atrás quedaron aquellos días de “El vivo bobo”, que consistía en una amonestación social para aquellos que se atrevían a contradecir el civismo reinante en Cali. Por ejemplo, allí aparecían quienes intentaban saltarse el puesto en la fila para esperar y abordar el bus, los que se pasaban el semáforo en rojo, los que se metían en contravía y hasta los que decían algún piropo salido de tono… y así por el estilo.
Sin dudas que eran otros tiempos…y eso que había menos escolares, menos bachilleres, menos tecnólogos, menos universitarios, menos profesionales y hasta menos doctores… Como quién dice, el civismo hay que enseñarlo más en casa porque allí es donde crece la semilla.
Y a propósito, tal como lo conté en Twitter hace algunos días: un papá corrió con un niño del brazo y cruzó el semáforo en rojo…le llamé la atención para que no arriesgara al niño así…y su respuesta fue: “él ya sabe correr…”. Lo miré… y seguí mi camino.
“El ya sabe correr…”, esto ocurrió en la carrera 1 con calle 62, un cruce bastante congestionado… El niño apenas debe estar andando por los tres años… @falavi2005
