El General (r) del Ejército, Mario Montoya Uribe, rechazó las acusaciones de crímenes de guerra y lesa humanidad realizadas por la Sala de Reconocimiento de Verdad de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP). Estas acusaciones involucran 130 casos de «falsos positivos» ocurridos en Antioquia entre 2002 y 2003, cuando Montoya comandaba la IV Brigada del Ejército en Medellín.
Además de negar su implicación en estos crímenes, el general retirado solicitó a la JEP la anulación de las acusaciones argumentando que sus derechos de defensa habían sido vulnerados en el proceso. Con esta decisión, el caso de Mario Montoya Uribe se remite al Tribunal para la Paz, donde enfrentará juicio por las 130 ejecuciones extrajudiciales. En caso de ser condenado, podría enfrentar una pena de hasta 20 años de prisión.
El coronel (r) Iván Darío Pineda Recuero también rechazó su responsabilidad en los delitos imputados por la JEP. Sin embargo, siete militares implicados en los mismos casos aceptaron su responsabilidad en las ejecuciones extrajudiciales. La JEP ha otorgado a las víctimas un plazo de 30 días para presentar sus observaciones en relación con estos crímenes de guerra y lesa humanidad atribuidos a estos exmiembros del Ejército.
