El Gobierno nacional de Colombia, a través del Ministerio de Relaciones Exteriores, ha autorizado la repatriación de 115 bienes culturales de colecciones privadas en Estados Unidos, los cuales regresaron en el avión presidencial. Este importante avance en la protección del patrimonio colombiano es visto como un ejemplo de cooperación internacional.
El embajador de Colombia en EE. UU., Daniel García-Peña, destacó que esta repatriación refuerza la memoria histórica del país y hace un llamado a quienes aún custodian piezas de origen colombiano para facilitar su retorno, enfatizando que esto fortalece los lazos bilaterales y el respeto por el patrimonio global.
El patrimonio cultural repatriado incluye:
- Piezas arqueológicas
- Piezas etnográficas
Estas piezas provienen de la colección de James Lawrence, un ex miembro del Cuerpo de Paz que sirvió en Putumayo entre 1970 y 1972. Lawrence adquirió ajuares funerarios en mercados locales, conocidos como «huacas», y en 1972 llevó a Nueva York varios artículos significativos, incluidos máscaras y figuritas de arcilla.
Tras el fallecimiento de Lawrence en junio de 2023, su hijastra, Jessica Lawrence, se puso en contacto con la Embajada de Colombia en Washington para identificar los elementos, que fueron posteriormente evaluados por el Instituto Colombiano de Antropología e Historia (ICANH).
Además, la colección anónima entregada a la Embajada en marzo de 2024 incluye piezas identificadas como parte del patrimonio arqueológico nacional.
El proceso de repatriación se enmarca en el «Acuerdo Relativo a la Imposición de Restricciones a la Importación de Materiales Arqueológicos y Etnológicos de Colombia,» que busca prevenir el tráfico ilícito de bienes culturales. La repatriación fue posible gracias al esfuerzo conjunto entre el ICANH, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia y las Fuerzas Militares de Colombia.
Este triunfo en la preservación de la cultura colombiana no solo fortalece la colaboración internacional en la protección del patrimonio cultural, sino que también representa un paso significativo hacia la recuperación de la herencia cultural del país.
