Aunque para muchos el feminismo se trata de la lucha para reivindicar a la mujer, hoy en día podemos ver lo contrario. La primera ola del feminismo, ubicada en los tiempos del Renacimiento (siglo XV y XVI) que luchaba por el voto femenino, el derecho a ejercer profesiones consideradas como masculinas y vetadas, por tradición, a la mujer, el acceso a las universidades y un salario digno (cosas que se podrían considerar válidas). Pero podríamos empezar a notar la parte mala de ella cuando empezaron a apoyarse en teorías como la de Engels.
Este personaje, mencionaba, entre otras cosas, que existía una subordinación social de la mujer con la maternidad y la familia: “El primer antagonismo de clases de la historia coincide con el desarrollo del antagonismo entre el hombre y la mujer unidos en matrimonio monógamo, y la primera opresión de una clase por otra es la del sexo femenino bajo el masculino. El hombre es en la familia el burgués, la mujer representa en ella al proletariado”. Por ello, empezaron a arremeter contra el matrimonio, la concepción y el amor romántico.
La persona que dió origen al feminismo posmoderno fue Simone de Beauvoir, conocida por frases como “No naces mujer, ¡te hacen mujer!”, haciendo referencia a que la feminidad era un constructo social.
Algo interesante sobre Simone de Beauvoir y su pareja sentimental Jean-Paul Sartre: ambos eran muy buenos amigos del dictador Fidel Castro y de Ernesto Guevara. De hecho, el fotógrafo cubano Alberto Korda documentó el encuentro entre la pareja con Fidel Castro y el Che.
Como podrán notar, el feminismo siempre estuvo ligado a ideologías progresistas y por ende, no nos podría sorprender el gran apoyo y militancia que tienen a favor del aborto y ahí es donde se muestra una gran incongruencia sobre lo que dicen defender.
Sobre lo expuesto, podemos hablar del “aborto selectivo”, donde lo podemos definir como: “La práctica donde por la condición del sexo del niño por nacer (si es hombre o mujer) los obligan abortarlo”.
Esta acción la podemos encontrar en las zonas donde los países valoran más al hombre que a la mujer, como en Albania, Armenia, China, Georgia, India, Corea del Sur, Hong Kong, etc…
Entre el año 1950 al 2017, en China ocurrieron 11,9 millones de abortos selectivos, donde por el simple motivo de ser mujeres, te abortaban, lo mismo ocurrió en la India, con 10,6 millones de abortos a mujeres.
Algo muy reciente, fue en Suecia, donde se declaró que no se le podía negar el aborto a una mujer que no quiere tener un hijo de determinado sexo. Lo peculiar de esto, es que fue pedido por una mujer después de realizarse dos abortos porque no quería una niña. Las feministas pasan más tiempo luchando contra un supuesto patriarcado, contra una desigualdad social (nunca vamos a ser iguales, somos seres distintos por naturaleza), que defendiendo a la mujer desde su comienzo. Si el feminismo dice defender a la mujer, lo debe hacer desde su existencia, no desde su conveniencia.