Un 8 de junio de 1938, la Asamblea Departamental del Valle del Cauca, mediante Proyecto de Ordenanza, decretó la constitución oficial de la Banda Departamental del Valle, símbolo del arte musical del suroccidente colombiano, forjador de nuevos talentos y en la que apasionados músicos han cumplido sus sueños. Ibsen Álvarez Parra, es uno de ellos.
Son 34 años vinculado a la Banda Departamental del Valle. Durante largos periodos lo hizo como músico trombonista, ingresó al Conservatorio ‘Antonio María Valencia’ en 1982 y ocho años después, concursó y logró un lugar en la agrupación sinfónica.
«Fue muy bonito, luego de permanecer cerca de un año viendo los ensayos. Me llenó de mucho orgullo poder poner en práctica los conocimientos adquiridos en el Conservatorio. Para mi familia fue maravilloso», cuenta Ibsen.
Este maestro recuerda que la hoy agrupación sinfónica profesional del departamento, tuvo sus orígenes con la Banda Marcial Pichincha que resonó para el público, cuatro meses después de su constitución. También, rememora, las tradicionales Retretas, infaltables, durante las mañanas de los domingos, en el Paseo Bolívar.
Actualmente, tiene a su cargo las partituras de la Banda Departamental del Valle: obras originales, para Banda, Banda y solistas, música de cámara y formatos de jazz. La agrupación está integrada por 40 músicos profesionales y, además, lidera talleres de capacitación a directores de bandas y estudiantes en procesos de profesionalización de diversos lugares de Colombia; así como concursos de jóvenes solistas y jóvenes compositores.