En un evento titulado «La pensional se defiende» en la Plaza de Bolívar, el presidente Gustavo Petro afirmó que su gobierno no presionará a ningún magistrado de Colombia, subrayando la importancia de la justicia. Defendió el derecho del pueblo a expresarse, rechazando la idea de que las movilizaciones sean consideradas una presión indebida sobre la Corte Constitucional.
Petro se refirió a la resistencia de algunas élites a aceptar que el pueblo tiene voz y derechos, contrastando esto con la necesidad de escuchar las demandas populares. También recordó casos pasados de interferencia en las cortes, como las escuchas ilegales, y destacó la labor de magistrados que han trabajado para llevar a la justicia a congresistas implicados en el paramilitarismo y narcotráfico.
El presidente concluyó proponiendo que estos magistrados sean condecorados con la Cruz de Boyacá por su valentía y compromiso con la justicia en Colombia, considerándolos un ejemplo para las futuras generaciones de juristas.