Gardeazabal

Por: Gustavo Alvarez Gardeazabal

Juan Guillermo Angel Mejía es hoy por hoy el pereirano más representativo y respetado. Su recuerdo como el gran alcalde que tuvo la capital de Risaralda.

Su liderazgo como senador, en donde fue presidente del Congreso, lo ha impregnado a lo largo de su vida de un amor desbordante por Pereira y su desarrollo. Y sin que le tiemble la voz, ha salido a defender a su tierra y a denunciar cuando la atropellan.

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El Grupo Argos, cabeza sobreviviente del GEA, propietario mayoritario de Odinsa, a su vez dueña mayoritaria de las cuestionadas Autopistas del Café, no resistió las críticas fundamentadas que el ilustre pereirano hizo en compañía de un grupo de 70 empresarios de Risaralda, Quindío y Valle a través de una respetuosa carta pública al presidente Petro sobre la abusiva realidad explotadora de las Autopistas del Café, ni mucho menos una columna periodística que el Dr Angel publicó sobre el ridículo y bochornoso espectáculo que el Grupo Argos montó alrededor de la solución provisional del puente barcaza en reemplazo del caído puente del Alambrado y, en un acto que solo puede ser calificado como vesánico y estúpidamente vengativo, acaba de comunicarle a través del abogado de las Autopistas que o se retracta de sus opiniones sobre el manejo de esa concesión o será demandado por injuria y calumnia y buscarán su condena a 54 meses de cárcel.

A más de ser una afrenta innecesaria del Grupo antioqueño contra Pereira y el Eje Cafetero,es un timbre de alarma sobre la censura que desde el cenáculo del GEA son capaces de ejercer amenazadoramente para quien cuestione la manera como manejan los bienes públicos, como el aeropuerto El Dorado o las Autopistas del Café que ellos explotan.

Como fui yo, quien desde estas crónicas le propuse al Grupo Argos que dialogara con quienes se había ideado la solución que a ellos no se les ocurrió para remediar el daño inmenso de la caída del puente, y la respuesta ha sido maltratar al más importante y respetado de los pereiranos ,creo que el Ministro de Trasporte debe proceder a revisar las ganancias desorbitadas y los daños generados por las Autopistas para caducarles unilateralmente la dizque intocable concesión .