En Colombia debe eliminarse la intermediación en el mercado de la energía eléctrica, advirtió el presidente Gustavo Petro

El presidente Gustavo Petro ha propuesto la eliminación de la intermediación en el mercado de la energía eléctrica en Colombia, afirmando que este es uno de los principales factores que encarecen los costos de la energía, especialmente en la costa Caribe.

Durante la inauguración del Parque Solar Fotovoltaico La Unión en Montería, el mandatario cuestionó la existencia de intermediarios en la cadena de suministro de energía, instando a la CREG a prohibirlos.

Petro explicó que actualmente las empresas distribuidoras, como Afinia, compran energía en la Bolsa de Energía y la venden a precios más altos a los usuarios, lo que genera una gran disparidad entre el costo de producción y el precio que pagan los consumidores. Usando el ejemplo de la planta Urrá, que produce energía a $220 por kilovatio/hora, el presidente subrayó que los usuarios están pagando tarifas que pueden llegar hasta $1.500 por el mismo servicio debido a la forma en que está estructurado el mercado.

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El presidente también criticó las regulaciones establecidas desde 1994, que permiten que el precio de la energía en la bolsa se fije según el costo de la generación menos eficiente, que en este caso es la energía de gas. Esta situación, según Petro, favorece a un monopolio que impone precios elevados, afectando a todos los colombianos.

Además, enfatizó la importancia de que las comunidades locales se beneficien directamente de proyectos como el Parque Solar. Argumentó que no basta con inaugurar estas instalaciones si las comunidades no obtienen beneficios tangibles. Propuso que las comunidades puedan ser socias en estos proyectos, lo que les permitiría tener un rol más activo y un mayor beneficio económico.

En cuanto a la autogeneración, el presidente Petro indicó que no debería haber cobros altos de distribución ni comercialización, ya que los propietarios de la energía serían las mismas comunidades o entidades que la generan. Esto, según él, podría llevar a la creación de múltiples comunidades energéticas a nivel municipal y propiciar una «revolución» en el sector energético que no solo sería tecnológica, sino también social y económica.