El filósofo alemán Jürgen Habermas para muchos el más importante vivo en la actualidad acaba de publicar un texto titulado “Hasta dónde apoyamos a Ucrania”
Un dilema que, en sí, antiético a mi manera de ver cuando Ucrania es invadida y está siendo destruida a golpe de misiles, obuses, cuando se viola el Derecho Internacional Humanitario y hay más de 5 millones de desplazados en apenas 70 días de guerra. ¿de qué razón comunicativa podemos hablar Habermas ante tanta irracionalidad desde Rusia y Putin “el Terrible”?
El destacado intelectual alemán sigue apostado al dialogó a la comunicación como forma de salirle al paso a la irracionalidad de la guerra del nacionalismo ruso alimentada por el espíritu histórico de resentimiento.
Habermas es un comunitarista europeo creyente en la civilidad transnacional como fuerza de distensión sin ver que el realismo ofensivo domina hoy el mundo en un conflicto proxy (en donde la OTAN entra y participa justamente por medio de Ucrania) en contra de Rusia algo que recuerda las guerras periféricas de la Guerra Fría, solo que ahora es en Europa.
Habermas también olvida que nadie negocia si ve opción de ganar, solo se negocia cuando hay un «equilibrio de pierde-pierde», pregúntenle eso a las FARC.
Finalmente, tampoco ese alarmismo nuclear del pensador germano hay que leerlo de forma apocalíptica de que una potencia nuclear nunca pierde, pues igual habría que decir una potencia nuclear nunca gana.
Que me disculpen los fans de Habermas sacrificar a Ucrania para complacer al caprichoso zar de Rusia, con los mismos argumentos que Europa sacrificara a Checoslovaquia ante Hitler no es aceptable. Hay veces que la teoría se hace «tibia» ante el realismo.
