Ganando tiempo se llama en el deporte, cuando uno ve que puede perder, porque que el contrario se está agrandando y es necesario tirarse al piso y demorarse, lo más que sea posible, para evitar el triunfo del adversario.
El gobierno está ganando tiempo porque siente que hay un descontento general por la carestía y el aumento desmesurado de toda la canasta familiar; además, está sintiendo que, alguno de sus partidos cómplices de gobierno, le están pidiendo demasiado y él no les puede cumplir.
Por eso, convocó a extras al Congreso para sacar, cuanto antes, algunas iniciativas como la reforma de la salud y la laboral.
Sabiendo que es año electoral y que, si no consolida su triunfo en los departamentos y ciudades que, votaron por el Pacto Histórico, en el futuro se le puede enredar la continuidad en el poder, necesita exprimir al máximo a los congresistas hambrientos de contratos y puestos.
Petro tiene que ganar en Bogotá, Barranquilla, Cali, Cartagena y algunas ciudades del eje cafetero; por supuesto, las gobernaciones de los departamentos Costeros. Medellín y Antioquia son su mayor reto. Para lograrlo, requiere que los partidos de gobierno le aprueben reformas, a toda marcha, antes de que se le volteen. Por ahora, está dedicado a buscar alianzas, en sitios donde ve difícil ganar, para decir que ganó como miembro de la coalición triunfante.
Excepto en Bogotá, donde habrá segunda vuelta, en el resto de país tratará de ganar dividiendo los contrincantes y, así, poder triunfar con un 30% de los votos. Por eso es que hay una mano te tontos útiles de candidotes, haciéndole juego a esa estrategia de la división.
Habrá promesa de dineros y de puestos a tutiplén, por parte del gobierno central; pero, los gobiernos locales también se jugarán enteros, para conservar su poder regional; esto será la danza de los millones.
Me parece increíble que, los políticos de las regiones no se den cuenta de que los van a capar parados, si no se unen y presentan buenos candidatos. Lastimosamente, por un bistec a caballo, venden su votico en el Congreso y eso no va a cambiar.
Ñapa: No coman cuento, la MinMinas dice lo que le dicta Petro, para después corregirla y venderse como transaccional; ese juego es claro.
Ñapita: ¿Qué van a hacer los de la USO (sindicato de Ecopetrol), cuando desaparezca el petróleo y el gas?
Ñaputa: Asumir el control, para fijar las tarifas de servicios público, es de una gravedad inconmensurable para el futuro de la inversión de empresas públicas y privadas y, para, la planeación del crecimiento, en acueductos, alcantarillados y agua potable.
