Es conocido el efecto que tiene la cuenta regresiva en la sicología humana, un ejemplo muy claro es el que sucede en los prisioneros antes y después de ser condenados.

Los detenidos, antes de saber cuál va a ser su sentencia, sienten todos los días, el presidio como un día más de cárcel; los que ya saben cuántos años de presidio, perciben cada día de su detención, como un día menos, privados de la libertad.

Eso pasará desde este 7 de agosto: Empezará la cuenta regresiva de este desgobierno. Cada día que pase lo sentiremos como un día menos de esta montaña rusa, llena de altibajos, de mentiras, de declaraciones por X, de contradicciones al interior del alto gobierno, de trenes en el aire, de carrotanques de oro, de corrupción infinita, de no llegar a los compromisos, de viajes y discursos galácticos, etc.

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En los primeros meses de esta cuenta regresiva que comienza, nos distraerá el payaso mayor, con Venezuela y la defensa de su ídolo Maduro; además de la amenaza con constituyentes y Fast track.

Por fortuna ya los colombianos no comemos cuento, ya sabemos que una cosa es lo que dice Petro cuando está tomando elixir cósmico y, otra muy distinta, lo que está haciendo el grupo de mediocres que tiene como ministros y altos funcionarios.

Todos nuestros paisanos conocen que tenemos un presidente mentiroso que no le da pena inventar todo tipo de fantasías y que poco le importa que le demuestren el tamaño de sus infundios.

Ya solo nos quedan 2 años de este grotesco circo; comencemos a descontar días: 1 año y 364 días para que termine este caos administrativo y este torbellino de inconcebible corrupción.

Algunos todavía tienen esperanza de que el gobierno corrija el rumbo y busque consensos para sacar adelante algunas leyes; Yo no tengo ni la más mínima esperanza: «vaca ladrona no olvida el portillo», y «por el desayuno se conoce el almuerzo», reza la sabiduría popular y no se equivoca. Agrego otro dicho que cae como anillo al dedo: «perro que come huevos, aunque le quemen el hocico».

Ojalá este tiempo que falta para que cese la horrible noche, sirva para que podamos escoger un sucesor que pueda corregir el rumbo de este país que va a quedar severamente lesionado, después de este caos administrativo que a ciencia y paciencia ha promovido el orate Petro.

Ñapa: Dolió la eliminación de la selección Colombia de fútbol femenino, que orgullo nos da el pundonor de esas mujeres, ejemplo para este país.