Esta semana nos debatimos entre el horrendo crimen de un peluquero y su madre, por parte del otro hijo de la desdichada mamá y, las declaraciones egocéntricas del fiscal Babosa, calificado por él mismo, el mejor investigador del universo.
Los medios de comunicación se han dedicado el 80 % de su tiempo a hablar de eso; el resto, a comunicar la tragedia de Saravena, Arauca y la pelea del «cara de vampiro» Zuluaga con sus copartidarios Uribistas.
Pasó de agache la disparada de la inflación, denunciada por todos los gremios, y el incremento del costo de los impuestos, tasas, multas, seguros, peajes y otras vainas, que suben indexadas por el aumento del 10% del salario mínimo.
Este es un fenómeno que debe ser corregido muy pronto, en el manejo del País y del cual no habla ningún candidato. Todas las leyes que salen ponen multas y sanciones en salarios mínimos; es decir que, lo que aparece como un beneficio del trabajador es al mismo tiempo su gran pérdida; se debería acabar con esa indexación de manera inmediata.
Mientras el desconcierto nacional continúa, menos para los candidatos a las próximas elecciones, quienes solo hablan de coaliciones y de mecánica política, nos debatimos entre la apatía y el frenetismo de los que quieren acabar con todo para volver a empezar de cero.
Esa es la razón del crecimiento de apoyos a «Kid Rodolfo», quien, con su campaña cantinflesca, dice lo que la gente quiere oír, aunque no tiene nada de profundidad; sí toca la fibra del odio a los políticos y su sinónimo: La corrupción.
Da grima ver candidatos con 20 personas recorriendo calles y saludando a diestra y siniestra, como cualquier reina comunal. Lo que se concibió como una panacea política, las llamadas consultas, está resultando un aburrido desfile de candidotes, desangelados, conociendo las plazas de mercado del País.
¿No será tiempo de que algunos candidotes se retiren y despejen la visibilidad de los que tienen alguna posibilidad?
Mientras eso pasa, quien ya aparece como ganador en las encuestas tiene gabinete, con Roy, Piedad y Benedetti, anunciando el gran cambio del País.
Ñapa: ¿La caída en picada de la imagen de la alcalde alcaldesa? Claudia «la corbatuda» era de esperar. Su único mérito para ser elegida fue su oposición a todo y su facilidad de calumniar; nunca había administrado nada; de ahí viene su fracaso.
La toma indefinida del Portal de las Américas es otra muestra más de su incapacidad como gobernante. La desgracia es que, pronto será candidata presidencial, aprovechando la memoria frágil del pueblo.
