KICO BECERRA

La ventaja de esta edad es que uno se puede sentar solo un una cafetería y, con toda confianza, se le sientan en la mesa damas de diferentes edades.

Ayer, se sentaron dos cuchibarbis y empezaron a hablar de ciencia ficción (para mí): Hablaron de rejuvenecimiento vaginal (me pongo colorado, escribiendo esto).

Mi cara de sorpresa y chisme fue tal que, ellas se rieron y me pasaron un brochure con información al respecto; lo mejor es que, me dejaron participar en la charla; rápidamente entré en esas honduras.

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La vaina comienza con la moda de tener pelada la cuca. Esa tendencia, irreversible, hace que se vea más la zona húmeda y le empiecen a mirar imperfecciones a esa parte, otrora cosa peluda. Nunca había pensado en lo verraco que debe ser arrancarse los pelos cucares y la esclavitud que eso genera, me agregó una de mis contertulias.

Pues bien, el rejuvenecimiento vaginal tiene varias peculiaridades, se puede hacer total, solo de labios o solo de clitoris. De pensar en eso me empecé a encoger como protegiendo mi criaturero; me puse a pensar cómo sería mi bocachico con los labios pintados.

Sigamos, la cuca reparación total, con láser, busca fortalecer las paredes vaginales. No se trata de estrechar la entrada, es una especie de botox de paredes, templada interna; para apretar mejor, me explicó mi vecina.

La labioplastia es el embellecimiento de los labios; se acortan, se alargan, se moldean; terminan siendo tan lindos que uno necesita salir a mostrarlos. Se acabaron para siempre esas cucas frontonas que se ven con ciertas prendas deportivas. Pregunte si había lápices labiales para cucas y me miraron extrañadas; la ignorancia es atrevida.

La clitoriplastia consiste en reducir los gallos caídos. Si, así de claro: Le quitan el capuchón del clítoris. Para los pocos versados en gallos, les explico que, este tiene una capucha que lo protege, una especie de prepucio que tiene esa deliciosa zona. Se trata de una circuncisión del prepucio del gallo, para que se vea más lindo, porque, con los años, por encopetado que sea el gallo, se vuelve como moco de bimbo.

La verdad me quedé mudo, al aprender tanto en tan poco tiempo. Se fueron mis furtivas contertulias, nos despedimos de beso en mejilla; terminamos, literalmente, íntimos amigos; las conocí enteritas.

No hay aprendizaje sin problemas; llegué a mi casa y le empecé a contar a la patrona lo del embellecimiento cucar. Me miró, preguntó dónde supe de eso; le dije que por Internet. Estoy durmiendo en la sala desde ese momento; la ciencia siempre ha sido perseguida.

Ñapa: ¿Alguien conoce una dama con cuca reparada? Necesito ese contacto; interés eminentemente científico.

Ñapita: Compro sofá largo.