Un total de un billón noventa mil millones de pesos se destinarán a los programas de educación en Cali, para la vigencia 2024.
Este es el monto que la Secretaría de Educación del Distrito presentará para estudio ante el Concejo de Cali, como parte del proyecto de acuerdo del presupuesto que la entidad territorial tendrá disponible para funcionamiento, pago de la deuda e inversión social y de infraestructura, para la vigencia fiscal del año próximo, el cual se estudia, por ley, entre octubre y noviembre.
El ponente del proyecto es el presidente de la Corporación, Carlos Hernán Rodríguez Naranjo. El estudio del mismo fue abierto por la Comisión de Presupuesto el pasado jueves 5 de octubre.
“Es la primera vez que Cali trascenderá la barrera del billón de pesos de recursos destinados a los programas educativos. El 66,4 % se irá al pago de la nómina del personal docente, directivo docente y administrativo, quienes hacen posible que los servicios de la educación pública lleguen a la población beneficiaria que, hoy está en 150.000 estudiantes atendidos en 92 instituciones educativas”, explicó el secretario de Educación de Cali, José Darwin Lenis Mejía.
El 13 % del presupuesto (cerca de $130.000 millones) estará dirigido a la estrategia de cobertura educativa, con la que se busca garantizar el acceso y permanencia de los alumnos en el sistema educativo oficial.
En el Programa de Alimentación Escolar, PAE, se invertirá el 6.6 % (casi $72.000 millones) para cubrir la asistencia alimentaria durante la totalidad del año lectivo 2024 para 150.000 estudiantes beneficiarios. En transporte escolar se emplearán $30.000 millones (2,8 % del presupuesto) para movilizar a 20.000 estudiantes que requieren de este servicio, de los cuales 1200 son atendidos con tarjetas MÍO y el resto son asistidos con la contratación de empresas de transporte especial. La población estudiantil beneficiaria del transporte escolar reside en la zona rural y en la ladera de Cali.
Actualmente, 750 estudiantes en condición de discapacidad son atendidos en programas educativos. Para darle continuidad a la educación de esta población se dejarán partidas presupuestales para mantener la cobertura.
Para aseo y vigilancia de las instituciones educativas oficiales se dedicarán $56.000 millones, para la contratación del talento humano que desempeñará estas labores. En pago de servicios públicos se garantizará una partida presupuestal de $8000 millones y $2000 millones más, para el acceso a internet en las sedes, cuyo convenio interadministrativo se ejecuta con las Empresas Municipales de Cali, Emcali.
Para la inversión en infraestructura educativa se invertirá el 1 % del presupuesto ($11.000 millones) en adecuación de algunas sedes escolares. En mobiliario se proyecta una partida de $1000 millones para dotar las nuevas instituciones, que se entregarán tras la ejecución de los 23 proyectos adelantados por el Fondo de Financiamiento de Infraestructura Educativa, del Ministerio de Educación.
Continuidad del programa Todos y Todas a Estudiar
Para darle continuidad a la estrategia de acceso a la educación superior a los jóvenes residentes en Cali, el próximo presupuesto incluyó partidas para los 7500 beneficiarios del programa Todos y Todas a Estudiar. La inversión será de $8000 millones para la vigencia 2024.
Para bilingüismo (programa Todos y Todas a Estudiar Inglés) se proyectarán $7500 millones para financiar la segunda fase.
Adicionalmente, en apoyo sicosocial se destinarán $1000 millones para la contratación de personal para hacer acompañamiento a la población estudiantil en aspectos relacionados con soporte emocional y salud mental.
Para el mejoramiento de la calidad educativa, se proyectan recursos por $3500 millones que se ejecutan en programas de cualificación docente, proyectos pedagógicos transversales, educación inicial, entre otros.
El secretario Lenis Mejía agrego: “Por supuesto, hay que seguir haciendo gestión y alianzas con el sector privado o con otras entidades para fortalecer los programas de calidad educativa, apostarles a los emprendimientos y al desarrollo en ciencia y tecnología. Sólo así podemos avanzar hacia una ciudad educadora, que piense en los procesos de transformación”.
El año lectivo para el sector oficial inicia a mediados de enero, con dos semanas de desarrollo pedagógico. El inicio de clases está programado para la primera semana de febrero, y se espera tener garantizada la prestación del servicio de alimentación escolar.
“Queremos ser responsables con los recursos, dejar todo proyectado para que se puedan ejecutar los programas de manera expedita. Especialmente, con el PAE es importante dejar garantizado el acceso al programa para los tres primeros meses, dado que es fundamental ese derecho, el del acceso a los alimentos, para los niños y jóvenes que estén matriculados en el sector oficial”, puntualizó Lenis.