El secretario de Seguridad y Justicia, Jimmy Dranguet Rodríguez, y el viceministro de Política Criminal y Justicia Restaurativa, Camilo Zúñiga, realizaron durante dos días, varios recorridos por los establecimientos penitenciarios de Cali y Jamundí.
El objetivo es analizar la situación carcelaria de la ciudad planteando acciones que se puedan adelantar desde el Gobierno Nacional y local para mejorar las condiciones de reclusión de los privados de la libertad; sobre todo para mejorar las condiciones de seguridad ciudadana.
“El Ministerio de Justicia y del Derecho viene haciendo una serie de visitas a diferentes municipios especialmente importantes para el desarrollo del país. Por esta razón, hemos venido a Cali para revisar el tema de la política criminal y penitenciaria y ver cómo se pueden abordar las iniciativas de justicia en la región”, manifestó el viceministro Zúñiga.
El funcionario aseveró que desde el organismo nacional de Justicia existe el compromiso de trabajar mancomunadamente con las autoridades municipales para generar proyectos que mejoren el acceso a la justicia de la población víctima, disminuir la problemática de hacinamiento de los centros penitenciarios y atender integralmente a los jóvenes que estén en el sistema de responsabilidad penal de adolescentes.
De acuerdo con el secretario de Seguridad y Justicia Distrital, Jimmy Dranguet, durante la visita del Ministerio de Justicia se acordaron 3 acciones para ejecutar en el mediano plazo, para mejorar las condiciones de los jóvenes recluidos en los Centros de Atención Especializada.
“La primera, tiene que ver con la implementación de bibliotecas en los CAE del Valle de Lili y el Buen Pastor, que formarían parte de la Red de Bibliotecas Públicas de Cali. Segundo, vamos a promover la creación de huertas urbanas en estos espacios para que los jóvenes puedan resarcir el daño que han hecho, generando productos bien sea para su autoconsumo o para beneficiar a otras poblaciones y; tercero, queremos sumarnos a trabajar con la ley que le brinda beneficios a las madres comunitarias privadas de la libertad; permitirles a estas cabezas de hogar que puedan cumplir parte de su pena trabajando y aportando a la sociedad que, de una u otra manera, dañaron con la comisión de delitos”, indicó el líder de la cartera de Seguridad y Justicia Distrital.
Respecto a la problemática del hacinamiento en las estaciones de policía, el funcionario indicó que el Distrito ya cuenta con un espacio donde esperan albergar este año 2023, a cerca de mil personas privadas de la libertad en condición de sindicadas.
Se trata de una bodega ubicada en el norte de la ciudad, la cual, próximamente entraría en un proceso de adecuación basado en las instrucciones y directrices que establece el INPEC para recluir sindicados.
Según Dranguet, la idea para el 2023 es trasladar a este nuevo espacio de reclusión transitorio, a la mayor cantidad de personas privadas de la libertad y dejar para la próxima vigencia todo listo para que la totalidad de los sindicados sean recluidos en este lugar.
De esta manera, se descongestionarían las estaciones de Policía y las Unidades de Reacción Inmediata, con el propósito de liberar la capacidad reactiva de los uniformados como corresponde al modelo nacional de vigilancia por cuadrantes.