“Tengo un sueño”, exclamó Martin Luther King, en su quijotesca misión de liberar de la opresión a la comunidad afro en los Estados Unidos de América, en plena década de los años 60 del siglo XX, el pasado 20 de mayo de 2022, un selecto grupo de docentes, egresados y estudiantes de la Universidad Santiago de Cali, expresamos a la Academia, “tenemos un sueño… el advenimiento de una nueva cultura frente a la muerte humana”, en desarrollo del PRIMER ENCUENTRO ACADEMICO DE TANATOLOGIA, cumplido en la Aula Máxima, sembrando consecuentemente ante la comunidad universitaria la semilla de sabiduría, de investigación y del conocimiento alrededor de la tanatología.
A mediados de la década del setenta, en desarrollo de mi tesis doctoral en compañía de mi condiscípulo de aula, Luis Alfonso Valencia Cruz, titulada “La Eutanasia a la luz de la moral, de la medicina y del derecho”, tesitura laureada con Mención Honorifica, por la directivas de nuestra Alma Mater, inicie mi singular interés por el conocimiento de la eutanasia y del homicidio piadoso, por su connotación especial de su móvil altruista de la piedad para posteriormente en condición de profesional del derecho, interpretará los pronunciamientos de la honorable Corte Constitucional con la promulgación primigenia de la Sentencia 239 de 1997, que por primera vez, despenalizará la conducta del actor de este delito por circunstancias especiales.
La ciencia médica a la par, igualmente iba generando opinión en la comunidad con las actuaciones de los galenos Barnard, Shuazember, Kevorkian, mientras que la iglesia católica desde el Vaticano reiteraba su concepción teocéntrica de la vida y la tanatologa Elizabeth Kubler Ross, entregaba a la inteligencia humana, su inmortal enseñanza en torno al proceso del morir humano con sus magistrales obras, legado seguido en nuestra país por la psicóloga Isa Fonnegra de Jaramillo.
El Congreso de la República por su parte archivaba los proyectos de propuesta por una Ley Estatutaria de eutanasia, como lo hizo recientemente, pese a las reiteradas exhortaciones de la misma Corte Constitucional para que legislará sobre el tema.
Toda esa corriente dialéctica frente la eutanasia encontró eco con el reconocimiento del Derecho a Morir Dignamente en la Sentencia T 970 de 2015, que permitió luego, a galenos, psicólogos, personal salud en general y a juristas, centrar su atención en la nueva conceptualización de la Tanatología, acuñada en 1901 por el médico ruso y premio nobel de medicina, Elías Metchnikoff, quien la concibió como la “ciencia de la muerte!”, que estudia el arte del morir humano, dejando atrás, la trajinada conceptualización de tanatólogos forenses.
Ese potencial de literatura médica, psicológica, clínica, jurídica, social, entre otros, se vio complacida con la realización del PRIMER ENCUENTRO ACADÉMICO DE TANATOLOGÍA y en el entendido de continuar con nuestros anhelos de constituir en nuestra ciudad, la Fundación Tanatológica y consecuentemente la Escuela de Formación tanatología.
En cuatro paneles se desarrolló el evento :“Perspectiva Sociológica de la vida y de la muerte”, “Alcances jurídico legales y jurisprudenciales frente al Homicidio Piadoso”, “Consideraciones clínicas y medicas frente la Eutanasia” y “Reflexiones éticas y filosóficas de la Tanatología y del Derecho a Morir Dignamente”, expuestos por calificados maestros y profesionales de la salud, del derecho, de la comunicación, que colmados de entrega y vocación académicas e investigativa nos permitieron compartir en este escenario de la inteligencia, su probidad y sabiduría.
Para cada uno de los panelistas, doctores Gloria Hurtado Castañeda, Moisés Neira Fajardo, Pedro González Sevillano, Darío Valencia Moreno, Einarco José Morales, Jorge Eduardo Paredes, Jessica López Peláez, Diego Fernando Orejuela, Julián Agudelo Jiménez, Adalberto Sanchez Gómez, Luis Carlos Giraldo y Carlos Alberto Moya, nuestra gratitud y admiración, extensivas al señor decano de la facultad de Derecho Doctor Diego León Gómez, a la Coordinadora de Extensión y Proyección Social, Doctora Angélica María Valencia como también a cada uno de los egresados y estudiantes de la facultad, integrantes del Comité Organizador del Encuentro Académico.
