En una jornada histórica, la Sala Plena Extraordinaria de la Corte Suprema de Justicia culminó este martes 12 de marzo con el anuncio de la elección de la jurista Luz Adriana Camargo como la sucesora de Francisco Barbosa en el cargo de fiscal General de la Nación. Tras obtener un respaldo sólido de 18 votos, Camargo se convierte en la primera opción después de la renuncia de Amelia Pérez, también ternada para el puesto.

Según declaraciones del presidente de la Corte, Gerson Chaverra, la elección se llevó a cabo en una única ronda de votación, donde Camargo obtuvo el respaldo necesario para alcanzar la mayoría requerida. En este sentido, Chaverra afirmó: «La Corte Suprema de Justicia informa al país que en la sesión de Sala Plena Extraordinaria celebrada el día de hoy se eligió a la doctora Luz Adriana Camargo como la nueva fiscal general de Colombia».

El proceso de elección se vio marcado por la relevancia de la figura de Camargo, exmagistrada auxiliar de la Corte Suprema de Justicia, quien ingresó a la lista como sustituta de Amparo Cerón, relacionada con el exfiscal Néstor Humberto Martínez. A pesar de su destacada trayectoria legal y política, su asociación laboral con el actual ministro de Defensa, Iván Velásquez, ha generado controversia en la oposición.

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Camargo, abogada de la Universidad de la Sabana y especialista en Derecho Penal-Criminología de la Universidad Libre de Colombia, ha desempeñado roles significativos en el sistema judicial, incluyendo el de fiscal delegada ante la Corte Suprema. Su experiencia y compromiso con la justicia se reflejaron durante su exposición ante la Corte Suprema el pasado 20 de noviembre, donde delineó una estrategia que prioriza la independencia y el combate contra la criminalidad, con un enfoque centrado en las víctimas.

Durante más de dos décadas, Camargo y Velásquez han colaborado en casos emblemáticos, como la investigación de la ‘parapolítica’ en Colombia y la condena del expresidente de Guatemala, Otto Pérez Molina. En sus palabras ante la Corte, Camargo enfatizó su compromiso con la independencia y la eficacia del sistema judicial, proponiendo líneas de acción que incluyen el fortalecimiento de las rutas de atención a las víctimas y la implementación de estrategias tecnológicas para el análisis criminal.

Con su elección, Luz Adriana Camargo asume un rol crucial en un momento de desafíos significativos para el sistema judicial colombiano, comprometiéndose a liderar una fiscalía que priorice la justicia y la defensa de los derechos de los ciudadanos.