El equipo médico del Centro de Bienestar Animal le salvó la vida a Arkana, una gata que fue víctima de un presunto falso veterinario tras un procedimiento quirúrgico inadecuado en la clínica Vertebrata, al norte de Cali.
De acuerdo con la Fiscalía, el presunto falso veterinario Miguel Ángel Parrado Amado se encuentra judicializado al ser acusado de practicar la medicina veterinaria sin los permisos ni estudios correspondientes y después de meses de investigación y múltiples denuncias sobre presuntos malos procedimientos veterinarios por parte de él en diferentes partes del país.
Tras una diligencia de allanamiento a las instalaciones de la Clínica Vertebrata, donde trabajaba este sujeto, en colaboración con el grupo Gelma de la Fiscalía, Arkana pudo ser rescatada y trasladada al Centro de Bienestar Animal para recibir atención especializada.
Proceso de atención y cirugía
Arkana, de poco más de un año, tuvo que ser trasladada de urgencia a las instalaciones del Centro de Bienestar Animal tras una exhaustiva valoración médica veterinaria que alertaba sobre su posible estado de salud comprometido.
Durante el procedimiento de diagnóstico, realizado por los médicos veterinarios en el Centro de Bienestar Animal, se descubrió que Arkana tenía una fractura en su patita izquierda trasera y estaba muy inflamada. Según el cirujano del centro, Miguel Burbano, un examen de rayos X evidenció la presencia de un cuerpo extraño dentro del canal medular, posteriormente identificado como una broca para madera incrustada en su hueso, que comprometió gravemente su médula ósea y los tejidos circundantes. La cirugía realizada de manera no técnica en la clínica Vertebrata, donde estaba inicialmente hospitalizada, desencadenó una infección tan grave que provocó la descomposición y desintegración del tejido de la patita de Arkana.
Ante esta situación y, posterior a una reunión del comité médico veterinario del Centro de Bienestar Animal, donde se evaluaron diversos aspectos de la salud de la gata, se determinó que una intervención quirúrgica era necesaria para preservar su vida.
“La evaluación final fue realizar la amputación del miembro debido al grado de infección y al daño del tejido”, indicó el médico Burbano. La decisión, de acuerdo al equipo médico del Centro de Bienestar Animal, se tomó con el único objetivo de proteger la salud y la integridad de la gata.
Después de la cirugía, Arkana fue trasladada a la sala de recuperación del Centro de Bienestar Animal, donde recibió cuidados y monitoreo constante por parte de los profesionales del área clínica. Luego de ofrecerle una atención especializada y un exitoso posoperatorio, Arkana pudo reunirse nuevamente con su familia humana para continuar su tratamiento y recuperación en casa.
“Desde la Unidad Administrativa Especial de Protección Animal rechazamos firmemente las acciones de los falsos médicos veterinarios. El ejercicio de la medicina veterinaria fraudulenta e irresponsable no solo pone en peligro la salud de los animales, sino que también socava la integridad de nuestra profesión. Respaldamos plenamente las investigaciones de la Fiscalía y colaboraremos activamente para garantizar que se haga justicia”, expresó el director de la Unidad Administrativa Especial de Protección Animal, Julio Miguel Oyola Ceballos.
El esfuerzo, la dedicación y la atención brindada por los 21 profesionales del área clínica del Centro de Bienestar Animal fueron fundamentales para salvar la vida de Arkana y ayudarla en su camino hacia la recuperación.