La Asamblea Nacional de Sudáfrica ha votado a favor de suspender las relaciones diplomáticas con Israel, coincidiendo con un acuerdo alcanzado con Hamás. Además, respaldaron el cierre de la embajada israelí en Pretoria, siguiendo las declaraciones del presidente Cyril Ramaphosa durante una reunión virtual extraordinaria del Grupo BRICS, donde condenó las acciones de Israel en la Franja de Gaza.
Ramaphosa calificó las acciones de Israel como un «crimen de guerra» y un «genocidio», solicitando a la Corte Penal Internacional que investigue los «crímenes de guerra» en Gaza. Sudáfrica se une a otros nueve países que han tomado medidas similares en relación con Israel, incluyendo Arabia Saudita, Bahréin, Turquía, Jordania y Libia.
En América Latina, Belice ha roto relaciones con Israel, mientras que Bolivia lo hizo a finales de octubre. Chile, Honduras y Colombia llamaron a consultas a sus embajadores. Aunque Brasil, México y Argentina no han roto relaciones, condenaron las muertes de civiles y pidieron un alto el fuego en la región.